viernes, noviembre 19, 2010

Consecuencias y efectos secundarios de la pastilla del día siguiente

La anticoncepción de emergencia debe contar con orientación médica. Si se hace de forma indebida, podría tener efectos a largo plazo.



La anticoncepción de emergencia debe utilizarse con moderación. Su uso frecuente no sólo puede disminuir la efectividad del método sino alterar los patrones de la ovulación −inhibirla o retrasarla−, lo que dificulta el cálculo de los días fértiles.

Debe ser prescrita por un médico, ya que el objetivo es saber por qué se recurre a ella. Lo ideal es hacerlo sólo una vez −máximo dos− y al mes siguiente comenzar a planificar. Si, por el contrario, se utiliza con intervalos menores a dos meses, los efectos no se hacen esperar en la mujer: según Juan Carlos Ramírez, ginecólogo de Profamilia, es posible que se lleguen a formar quistes en los ovarios (por ovulaciones que quedaron detenidas), haya retención de líquido, malestar en los senos, dolor de cabeza o alteración del periodo menstrual (deja de venir o llega muy seguido, hemorragias o ausencia de menstruación).

“No es lógico utilizarlo de forma frecuente, ya que debe entenderse como un método de planificación de emergencia. Si se usa sólo una vez, se desordena el comportamiento natural de los ovarios de forma temporal y al ciclo siguiente se ajusta nuevamente. Pero al hacerlo de forma continua, es posible que se alteren otras hormonas diferentes a las de la ovulación y haya, por ejemplo, ausencia de periodo menstrual, crecimiento inadecuado del endometrio o compromiso del sistema óseo”, señala Cecilia Hernández, ginecoobstetra especialista en medicina reproductiva.

Cómo actúa y efectos secundarios

Este tipo de anticoncepción actúa de la siguiente manera: altera la ovulación o los procesos posteriores a ésta; produce cambios en el moco cervical para evitar el ascenso de los espermatozoides (lo hace impenetrable) e impide la implantación del óvulo fecundado.

Sus efectos secundarios pueden ser náuseas, vómito, dolor de cabeza y congestión en los senos, que duran máximo 24 horas después de ingerir el medicamento. “También pueden haber alteraciones en el ciclo menstrual: a la mitad de las mujeres les llega el periodo en la fecha esperada; a un 23 por ciento se les puede adelantar cinco días y a un 27, atrasar por cinco días”, explica Juan Carlos Vargas, ginecólogo de Profamilia.

Si se toma cuando el endometrio está crecido, es posible que se presente un primer sangrado, que suele ser abundante, y luego uno posterior. Los cambios menstruales varían de acuerdo con el momento del ciclo en que se ingieran las píldoras, indica Vargas.

Efectividad

La anticoncepción de emergencia reduce en un 85 por ciento la posibilidad de un embarazo. “Creer que al tomarla no va a haber embarazo y hay protección por más tiempo es un error, pues sólo protege por 24 horas”, añade Vargas.

Se recomienda tomar estas píldoras lo más pronto posible a la relación sexual, dentro de las primeras 72 horas. Un estudio de la Organización Mundial de la Salud (OMS) demostró, incluso, una efectividad hasta de 120 horas, aunque entre la hora 73 y la 120 se observó una duplicación de embarazos (2,6 por ciento) en comparación con las primeras 72 horas, cuyo porcentaje de
gestaciones fue del 1,64.


Métodos

Hay dos formas de anticoncepción de emergencia: la pauta de Yuzpe y la píldora del día después. La primera, que se remonta a los años 90, consiste en la toma de cuatro píldoras anticonceptivas cada 12 horas en dos dosis.

Sin embargo, debido a que no todas las pastillas traen la misma cantidad de progesterona y estrógenos es recomendable que visite al ginecólogo en caso de querer utilizar el método de Yuzpe, el cual puede producir efectos secundarios, como mareos, vómito y malestar general.

“Muchas tienen cajas anticonceptivas en casa y toman dos o cuatro píldoras cada 12 horas (método de Yuzpe), guiadas por la farmacia, para no recurrir a la del día después”, puntualiza Juan Carlos Ramírez.
La segunda forma –que es más efectiva–se basa en la ingesta de 2 pastas, 1 cada 12 horas o en una sola dosis, como lo recomendó la OMS.

Hasta hace 2 años, cuando sólo existía la marca que comercializaba Profamilia, se vendían, en promedio, 200 cajas diarias de la píldora del día después, tras su ingreso al mercado farmacéutico en el año 2001. Con la aparición de diferentes marcas comerciales, hoy se vende en muchas farmacias sin exigir fórmula médica.

El componente de ‘la píldora del día después’ es el levonorgestrel, un derivado sintético de la hormona progesterona, que la mujer produce después de la ovulación y mantiene el embarazo.

La píldora del día después está libre de contraindicaciones médicas, siempre y cuando no se tome de manera recurrente. Es un medicamento bien tolerado.

Ciclo menstrual

La hipófisis y el hipotálamo segregan hormonas que actúan sobre el ovario y estimulan el crecimiento de uno de sus folículos. Cuado éste madura, se rompe y libera el óvulo, mientras el ovario produce estrógenos que nutren el útero y hacen que su capa interna (endometrio) se vuelva un lecho frondoso, apto y listo para anidar el huevo fecundado.

También modifican la consistencia del moco cervical, el cual se vuelve transparente y receptivo a los espermatozoides. El cuello uterino, igualmente, se reblandece cuando está fértil.

El ciclo menstrual dura, en promedio, 28 días. La ovulación, que se produce a mediados de cada ciclo, dura 36 horas. Si el óvulo no es fecundando, se desintegra y reabsorbe. Si no hay fecundación, se produce el sangrado.

Cómo encontrar el Punto-G femenino



El punto G puede ser estimulado por los dedos del compañero (con un tipo de movimiento “ven aquí”), con un consolador o con el pene…. El punto de Gräfenberg (punto G) es una zona sensible que se percibe a través de la pared anterior o superior de la vagina. Los investigadores sexuales Dr. John Perry y Dra. Beverly Whipple la denominaron Punto G (G Spot) después que el médico alemán Dr. Ernst Gräfenberg la describiera en el año 1950.

Durante unas Jornadas de Sexología la Dra. Beverly Whipple entregó gentilmente un artículo donde refería que “el punto G puede sentirse a través de la vagina a mitad de camino entre la parte posterior del hueso púbico y el cuello del útero y se detecta como una pequeña protuberancia que se hincha mientras es estimulada. Al principio, cuando se lo toca muchas mujeres dicen que sienten como la necesidad de orinar, a pesar de que la vejiga esté vacía. Después de 2 a 10 segundos de estimulación la reacción inicial se reemplaza, en algunas mujeres, por una fuerte y distinta sensación de placer sexual. Hay mujeres que experimentan un orgasmo por la estimulación de esta zona y algunas expulsan un líquido proveniente de la uretra cuando experimentan este tipo de orgasmo. El fluido emitido tiene aspecto lechoso: no es semen ni orina, no tiene olor, sabor ni mancha.”

La Dra. Whipple agregaba allí que “las mujeres dicen tener dificultad en localizar y estimular el punto G por sí mismas (salvo que usen un consolador, un vibrador del punto G o aparato similar) pero no tienen dificultad en identificar la sensación erótica cuando esta área es estimulada por una pareja. El problema de tratar de localizar el punto de Gräfenberg por sí mismas es que se necesitan dedos muy largos o una vagina corta para alcanzar el área mientras yacen acostadas sobre la espalda.”

Continúa diciendo que “cuando se estimula el punto G y comienza a hincharse, por lo general, puede sentirse como un pequeño poroto (frijol) esponjoso y en algunas mujeres se hincha hasta alcanzar el tamaño de una moneda. Al experimentar con el punto de Gräfenberg necesitará aplicar una presión mayor que la que hace en el clítoris y puede sentir una sensación interna mayor que la que se siente con la estimulación del clítoris”.

“Después de que haya explorado su punto de Gräfenberg puede querer compartir la experiencia con un compañero. El punto G puede ser estimulado por los dedos del compañero (con un tipo de movimiento “ven aquí”), con un consolador o con el pene. La posición que más tiende a la estimulación con el pene es la de la mujer sentada sobre el varón. Muchas mujeres dicen experimentar múltiples orgasmos por este tipo de estimulación y algunas experimentan la emisión de fluido orgásmico. El orgasmo que resulta de este tipo de estimulación suele ser una sensación profunda interior.”

La sexóloga norteamericana agregaba que “al compartir esta información con ustedes, no quiero crear un nuevo objetivo para que alcancen las mujeres. Sin embargo, quiero que tomen conciencia de la variedad de experiencias orgásmicas de que dispone una mujer. En efecto, algunas mujeres han realmente experimentado su primer orgasmo al estimular el punto G. Quiero ayudar a aquellas mujeres que disfrutan de este tipo de estimulación y de los orgasmos con o sin eyaculación de fluido para que se sientan mejor de sí mismas y de lo que están experimentando. Muchas mujeres dicen sentirse “anormales” porque les gustó este tipo de estimulación o porque ellas expulsaron un fluido con la estimulación sexual. En efecto, algunas mujeres en el pasado aprendieron a retener el fluido y también aprendieron a contenerse y no tener orgasmos, para evitar la confusión de ser lo que ellas consideraban “anormal”.

Los secretos del orgasmo femenino



La sensación subjetiva de orgasmo está centrada -en la región pélvica- en el pene, en la próstata y en las vesículas seminales en los hombres y en el clítoris, en la vagina y el útero de las mujeres.

El orgasmo es una experiencia de corta duración, de no más de diez o doce segundos, con una intensidad difícil de explicar en palabras. Que las mujeres no tengan la facilidad de tener orgasmos que sí tienen los hombres, no tiene nada que ver con el tipo, la manera, o el modo de obtenerlos.

De hecho, la incapacidad de alcanzar el orgasmo durante el coito, a pesar de una respuesta plena ante otras formas de estimulación sexual, constituye la queja más común de las mujeres que buscan ayuda de los terapeutas sexuales.


Los orgasmos femeninos pueden ser obtenidos acariciando el clítoris o la zona aledaña a él. Para ello, debemos advertir que lo que conocemos por "clítoris", es apenas la parte visible y palpable de un órgano muy complejo y extenso, que hunde sus raíces cabalgando sobre la entrada del conducto vaginal, por detrás de los labios mayores y menores de la vulva.


No existe el orgasmo femenino sin la intervención del clítoris. Inclusive aquellas mujeres que dicen que sólo logran el orgasmo con la penetración, se sorprenderían si supieran que lo obtienen porque el pene roza la entrada de la vagina, y golpetea con el hueso pubiano y las bolsas testiculares la zona de la vulva.


Esto quiere decir que se excita el clítoris de muchas maneras, porque se encuentran en él los cuerpos cavernosos (igual que en el pene) que se llenan de sangre con la excitación y el roce.

Se trata de aquella región pequeña -que se toca como una pequeña fosita en el techo del conducto vaginal y en la entrada del mismo- conocida como "Punto G", que hace relieve cuando la mujer se encuentra excitada sexualmente.


Este punto se encuentra situado en la cara anterior de la vagina, a medio camino entre el hueso del pubis y el cuello uterino, a unos tres centímetros del exterior de la vagina.


Puede sorprender, pero los 2/3 superiores de la vagina carecen de terminaciones nerviosas. Por lo tanto, carece de sentido, hoy en día, hablar de distintos tipos de orgasmo.

Todos los orgasmos, directa o indirectamente, tienen intervención del clítoris.

Para estimular el punto "G", apoye el dedo suavemente y de una forma acompasada sobre el punto descrito, modificando el ritmo según el resultado obtenido.


Este tipo de caricia requiere de mucho tacto ya que el hombre puede acelerar o ralentizar, aumentar o reducir la presión y con ello hacer variar el grado de excitación de su pareja.

Se recomienda que para efectuar este tipo de caricias las manos estén completamente limpias, las uñas bien cortadas y limpias, y no estaría de más utilizar un poco de crema o aceite lubricante a fin de hacerlas más suaves si cabe.


Las sensaciones obtenidas serán de menor intensidad que las del orgasmo clitorideo, pero permitirán un orgasmo más rápido y mayor número de repeticiones, que pueden ser simultáneas con la estimulación del clítoris y otras zonas erógenas.

La estimulación del Punto G mediante la introducción del pene resulta difícil si no se ayuda con la estimulación manual, especialmente en aquellas mujeres que tengan la vagina distendida por los partos.

La variedad de la obtención del orgasmo femenino, la experimentación, la posibilidad de goce de diferentes maneras, proporciona una idea aproximada de la salud mental, no sólo sexual, de la mujer.

Y hoy, a comienzos del siglo XXI, la salud mental de una persona, es medida por la posibilidad de tener opciones.

miércoles, noviembre 17, 2010

Cómo encontrar el Punto G de una mujer y técnicas para enloquecerla

¿Sabía que las mujeres pueden tener muchos tipos diferentes de orgasmo? Es cierto. Por supuesto, no es una sorpresa que el “santo grial” de todos los orgasmos femeninos se consigan con el punto G. ¡Pero la parte difícil es encontrar y saber complacer su punto G! Aquí hay una guía de la A a la Z sobre todo lo que debe saber.



1. Cómo encontrar el punto G


Primero que nada, el punto G es de hecho una zona, más que un punto real. El punto G se localiza a unas dos pulgadas dentro de la vagina, en el lado superior. (Debajo de la cara interna de su estómago)

Se dará cuenta cuando lo encuentre, porque se siente como un bache acanalado, como el techo de su paladar, justo detrás de sus dientes frontales.

2. ¿Cómo debo estimularlo?

Si bien la mayoría de los hombres adorarían satisfacer a sus mujeres con la penetración, no siempre es la mejor idea. ¿Por qué?

Porque depende de factores como la posición, el nivel de excitación de ella, y la forma y tamaño del pene y de la vagina. Resumiendo: usar los dedos es una forma más fácil de alcanzar el orgasmo con mayores probabilidades de éxito.

3. Importante: Antes de estimular su punto G

En la mayoría de los casos, las mujeres necesitan que estimulen su clítoris antes de estimular su punto G. Pero una vez que esté completamente estimulado, el clítoris es frecuentemente demasiado sensible para el contacto directo. Pregúntele a su señora. De otra manera, el punto G podría sentirse seco e incómodo. Luego de este punto, puede avanzar hacia el punto G.

Primero que nada, el punto G es de hecho una zona, más que un punto real. El punto G se localiza a unas dos pulgadas dentro de la vagina, en el lado superior. (Debajo de la cara interna de su estómago)Se dará cuenta cuando lo encuentre, porque se siente como un bache acanalado, como el techo de su paladar, justo detrás de sus dientes frontales.Si bien la mayoría de los hombres adorarían satisfacer a sus mujeres con la penetración, no siempre es la mejor idea. ¿Por qué?Porque depende de factores como la posición, el nivel de excitación de ella, y la forma y tamaño del pene y de la vagina. Resumiendo: usar los dedos es una forma más fácil de alcanzar el orgasmo con mayores probabilidades de éxito.En la mayoría de los casos, las mujeres necesitan que estimulen su clítoris antes de estimular su punto G. Pero una vez que esté completamente estimulado, el clítoris es frecuentemente demasiado sensible para el contacto directo. Pregúntele a su señora. De otra manera, el punto G podría sentirse seco e incómodo. Luego de este punto, puede avanzar hacia el punto G.

4. Las mejores posiciones para estimular el punto G

Para estimular realmente su punto G, necesitará estar en una posición que le dé fácil acceso para hacer su magia. Aquí hay dos sugerencias: 1) Su señora se recuesta boca arriba mientras que usted se recuesta junto a ella, utilizando su brazo más fuerte. 2) Ella se sienta en la posición del perrito, mientras que usted se sienta y la complace por detrás. En realidad, si quiere más pasión y emoción, intente cambiar de una posición a la otra durante el transcurso de su estimulación. Ahora hablemos de cómo debería complacerla.

5. Cómo estimular su punto G con esta técnica

El movimiento que debe usar es el del gesto de “ven aquí”, utilizando sus dedos. Tenga en cuenta que el punto G es diferente de su clítoris, lo que significa, en la mayoría de los casos, que lo acariciará un poco más fuerte que el clítoris. Comience masajeándolo con suavidad y ábrase camino hasta un punto en que ella lo encuentre increíblemente satisfactorio.

6. Cómo notar si ella lo está disfrutando

Primero que nada, recuerde que la mejor sensación va a variar de mujer a mujer. Alterne entre dos movimientos o toques muy suaves para saber qué le gusta más a ella. Sabrá lo que le gusta por su respiración porque lo aprieta firmemente. Dicho todo eso, hay una manera de hacer esta experiencia aún MÁS placentera.

7. La pieza faltante de un orgasmo poderoso

¿Sabía que los juegos preliminares prolongados intensifican los orgasmos? Es verdad. Sin embargo, los hombres normalmente se enfocan tanto en “desempeñarse” que se olvidan de condimentar su vida sexual con cosas nuevas y excitantes. Enfrentémoslo: la mayoría de nosotros somos culpables de esto. Se quita la ropa. Allí va, y, en unos pocos segundos o minutos, acaba la rutina. Pero al desaparecer la magia en la habitación, se vuelve más y más difícil hacer que la mujer alcance el orgasmo. ¿Por qué? Porque las mujeres desean variedad en su experiencia sexual. La mejor manera de complacer a las mujeres a largo plazo es tener una mochila llena de ideas listas para ser utilizadas cuando se necesitan. No puedo enfatizar lo suficiente lo necesario que es mantener su vida sexual fresca y emocionante en todas sus formas. Ese es el secreto de una vida sexual satisfactoria.

Un video para repasar estos pasos